El desafío principal de Onl arquitectura será como desarrollar vivienda en un entorno hostil. 

Un entorno con niveles extremadamente altos de ruido y de contaminación producidos por el paso de 140.000 vehículos al día.

Un paisaje difícil de mirar por la presencia constante de los automóviles discurriendo por una infraestructura elevada y por los hitos que salpican esta periferia: una central de distribución eléctrica, el gran volumen de una gasolinera etc. 

Si bien el entorno inmediato es bastante hostil, la orientación del edificio posibilita, desde la mayor parte de las viviendas, una visión lejana hacia el este – sobre parque y Santa Coloma – y hacia el oeste – sobre Nou Barris y la Sierra de Collserola.  

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La respuesta a estos condicionantes será relacionarse con el exterior desde una distancia prudencial, a través de elementos que protejan del ruido, filtren el aire exterior y tamicen la visión del entorno cercano para intensificar la relación con el paisaje lejano. 

Por lo tanto las estancias no se abren directamente al exterior, se disponen alrededor de una galería que será un primer plano de descanso de las miradas, en el que los objetos – plantas, persianas – que la habiten dejarán en segundo término al paisaje exterior. 

Con las ventanas de las estancias cerradas hacia la galería, el ruido exterior no estará presente, y por lo tanto la vida se podrá desarrollar de forma agradable. 

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